En el artículo analizaremos los potenciales peligros de la descarga eléctrica, así como las medidas necesarias para accionar desde la prevención de este tipo de accidentes.
Qué es una descarga eléctrica
Se denomina descarga eléctrica a cualquier fenómeno que provoque la irrupción de un circuito eléctrico, provocando el “escape” de energía eléctrica sobre una superficie, elemento o ser vivo. Según factores como la intensidad de corriente, la densidad eléctrica, la tensión, si se trata de corriente continua o corriente alterna, o el uso de dispositivos como sensores de térmica o disyuntores, se determinará su daño.
Cuándo sucede y por qué sucede una descarga eléctrica
La descarga eléctrica es un fenómeno de tipo eléctrico que hace que circule una corriente eléctrica momentánea y repentina entre dos objetos que poseen diferente potencial eléctrico. Un ejemplo clásico de descarga eléctrica es el que sufre el pararrayos al ser alcanzado por un rayo.
La explicación físico-química de dicho fenómeno está sustentada en la posesión molecular de electrones en toda la naturaleza, incluyendo al ser humano y a la electricidad, dos elementos que poseen diferente potencial eléctrico en cuanto se entienda al potencial eléctrico como una carga eléctrica brindada por la cantidad de electrones en cada uno.
Aplicada a un concepto diario, donde los dispositivos e instalaciones eléctricas están pensadas para no estar en contacto directo con humanos, animales o superficies y sustancias, estas descargas suelen ocurrir al provocarse un desperfecto en la red eléctrica, que genera una descarga eléctrica hacia afuera de su sistema, que puede ser absorbida por cualquier entidad externa a él.
Características de una descarga eléctrica
Este tipo de descarga es peligrosa, no sólo desde los efectos a corto y largo plazo, sino por su letalidad en caso de tratarse de una corriente de alta intensidad. En caso de tratarse de amperajes de magnitud la reacción del cuerpo es una tensión rápida que puede finalizar en un paro cardiorrespiratorio.
También hay que tener en cuenta que se transmite fácilmente debido a su alto caudal de electrones en el flujo eléctrico, por lo que eso potencia su peligrosidad en caso de entrar en contacto con superficies electrificadas como puede serlo el agua, así como el contacto piel a piel con personas o animales en electrocución.
Por qué y cuán peligrosa es una descarga eléctrica
Los accidentes por electrización dependen de la cantidad de tiempo a la que se expone una persona a la electricidad, de si ésta ha pasado anteriormente por sustancias o materiales aislantes o materiales conductores y de la intensidad de la corriente eléctrica en sí.
Lo que se puede afirmar es que la electricidad actúa sobre diferentes tipos de tejidos humanos, afectando a varios, entre ellos tejidos nerviosos, arterias, músculos, piel, tendones, tejido adiposo y huesos, en orden de menor a mayor resistencia ante el paso de corriente eléctrica a través de ellos.
Los síntomas asociados a accidentes mediante descarga eléctrica son quemaduras en los lugares de entrada y de salida de la corriente (la electricidad tiende a ir a tierra, pero el humano funciona como un excelente conductor entre el tablero eléctrico y ella), parálisis muscular en extremidades y corazón por el paso de corriente, fracturas de huesos por contracciones musculares y formación de gas en sangre como producto de la electrólisis. A estos se suman los politraumatismos causados por golpes o caídas al recibir el impacto de la corriente.
Cómo prevenir una descarga eléctrica
Para prevenir descargas eléctricas accidentales, te indicamos estos consejos:
- Contar con dispositivos como disyuntores y tapones de térmica, además de verificar que el edificio o casa cuente con un pararrayos adecuado (todos lo poseen). Los primeros dos dispositivos cortarán automáticamente la electricidad en caso de detectar variables o desperfectos en la instalación eléctrica.
- Trabajar con la luz cortada: Para arreglos de luz es indispensable estar con la luz cortada o el sistema apagado. Esto se puede confirmar con un buscapolos antes de iniciar el arreglo.
- Usar calzado: Aunque parezca ingenuo, tener una capa de suela de goma en forma de calzado constituye un excelente aislante y le da a la electricidad la obligación de buscar otro camino para llegar a tierra en caso de descarga.
- Materiales aislantes: En caso de arreglos, recordar utilizar pinzas y herramientas con un mango en condiciones, que no esté perforado ya que el contacto con la piel generaría una descarga. En caso de arreglar cableado, recordar cubrir los empalmes con suficiente cinta aislante.
- En caso de descarga eléctrica sobre una persona, se recomienda aislarla de la fuente eléctrica mediante un material aislante (palos de escoba de madera, por ejemplo) y bajo ningún concepto se la debe tocar directamente mientras esté en electrocución.
- El peligro del agua: Debido a su alta electronegatividad, el agua es excelente conductor. Verificar que electrodomésticos como heladeras o lavarropas no tengan pérdida de agua, ya que si sus cables de alimentación están defectuosos, es un peligro potencial.
- Revisar que las instalaciones eléctricas se encuentran en perfecto funcionamiento, programar un mantenimiento reducirá posibles riesgos.
